Las directrices del CIE trazan el camino hacia la prestación de cuidados de salud mental de alta calidad para todos

OMS
13 Marzo 2024
WS 07

El Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) celebró un webinario el 6 de marzo de 2024 para lanzar sus nuevas directrices sobre la enfermería de salud mental.

Las directrices representan el compromiso del CIE de respaldar al personal de enfermería en la prestación de cuidados de alta calidad, éticos y compasivos a las personas con problemas de salud mental en todo el mundo.

Están diseñadas para mejorar la coherencia y la calidad de los cuidados prestados, al mismo tiempo que ofrecen un plan claro para que el personal de enfermería pueda abogar por las mejores prácticas y políticas sólidas. Además, buscan facilitar el acceso del personal de enfermería al autocuidado adecuado, al desarrollo profesional y a oportunidades educativas.

El webinario fue presidido por la Dra. Pamela Cipriano, presidenta del CIE, quien destacó que las directrices son un avance en la misión colectiva de la enfermería de mejorar los cuidados de salud mental en todo el mundo.

La Dra. Cipriano enmarcó las directrices dentro del contexto de la definición de salud de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la cual la describe como un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no sólo la ausencia de afecciones o enfermedades. Asimismo, hizo referencia a la definición de salud mental de la OMS como un estado de bienestar en el que el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede hacer frente a las tensiones normales de la vida, trabajar de forma productiva, y contribuir a su comunidad.

La salud mental es un derecho humano

La Dra. Cipriano afirmó que la salud mental es un derecho humano universal y que las personas que viven con trastornos mentales "...tienen los mismos derechos que cualquier otra persona a vivir libres de discriminación, violencia y estigma".

Afirmó que la salud mental del personal de enfermería es de vital importancia. La pandemia y las muertes, el estrés, el miedo, la fatiga y los daños morales asociados que han sufrido han tenido consecuencias en ellos y la profesión.

"La pandemia fue una alerta, y todos sabemos que el mundo ha despertado a la dramática necesidad de servicios de salud mental. La recuperación y sanación de estas experiencias sin precedentes apenas están comenzando, y la lentitud en los avances es realmente una amenaza para todo el personal de enfermería, así como para los pacientes y las comunidades a los que servimos."

La Dra. Cipriano expuso los desafíos que enfrenta el personal de enfermería al brindar cuidados de salud mental. La mitad de la población mundial padecerá una enfermedad mental en algún momento de su vida, más del 70% de las personas que desarrollan una enfermedad mental grave o trastornos por consumo de sustancias no recibe ningún tipo de tratamiento. El acceso a los servicios es especialmente difícil en los países de ingresos bajos y medios, donde muy pocas personas reciben el tratamiento que necesitan.

El personal de enfermería está a la vanguardia de la prestación de cuidados compasivos. El reto al que se enfrentan, abordado por estas directrices, es liderar una transformación en los cuidados de salud mental y superar los problemas de insuficiencia de servicios y de personal de enfermería.

La Dra. Cipriano concluyó su introducción con estas palabras: "A medida que profundicen en el conocimiento de las directrices de salud mental del CIE, les insto también a aprovechar esta oportunidad para escuchar y comprometerse con el panel de expertos en salud mental de renombre mundial. Ellos se centrarán en promover un enfoque de cuidados basados en los derechos, ético y compasivo, así como en la urgencia de actuar por la salud de todas las personas".

No hay paridad entre la salud mental y la física

El enfermero jefe adjunto del CIE, David Stewart, quién supervisó la elaboración de las directrices, compartió detalles sobre el prolongado proceso de desarrollo y dio las gracias a los numerosos expertos en enfermería de casi 60 países de todo el mundo que contribuyeron a su creación.

El Sr. Stewart afirmó: "Reconocemos que en ningún lugar del mundo la salud mental goza de paridad con la salud física en las políticas nacionales, los presupuestos o la educación y la práctica. Es indefendible que la gente no pueda acceder a servicios de cuidados de buena calidad, porque es un derecho humano tener el nivel más alto posible de salud mental y física".

Una de las coautoras de las directrices, la Dra. Madeline Naegle, catedrática emérita de la Escuela Superior de Enfermería Rory Meyers y consultora mundial en salud mental, destacó la aplicabilidad de las directrices en países con culturas y recursos educativos y financieros muy diferentes.

La Dra. Naegle afirmó: "Nosotros, como enfermeros, sabemos que es el trabajo interpersonal, las terapias interpersonales, los esfuerzos por gestionar los cuidados y los esfuerzos por llevar a los pacientes a los recursos adecuados, lo que realmente nos hace avanzar. Uno de los puntos que destacamos con más fuerza en este documento es que queremos que el personal de enfermería esté bien preparado, que hagan lo que puedan de forma interpersonal y que utilicen los sistemas que tienen, ya sean complejos o básicos, para conseguir que la gente reciba los cuidados que necesita."

Consenso sobre normas de práctica

Añadió que el principal objetivo de las directrices es promover un consenso sobre las normas de práctica: "Tenemos una gran visión ante nosotros. No estamos todos en el mismo sitio, pero lo que aporta calidad de forma consistente a los receptores de nuestros cuidados es que hemos acordado ciertos estándares de práctica y que enseñaremos a nuestros estudiantes a alcanzar esos estándares de práctica al graduarse. Queremos instar al personal de enfermería de sus comunidades, por pequeñas que sean, a que alcen la voz cuando se hagan planes sobre la prestación de cuidados en salud".

Charlene Sunkel, defensora de la salud mental basada en experiencias vividas y fundadora y directora ejecutiva de la Global Mental Health Peer Network, felicitó al CIE por las directrices. Destacó la importancia de que las personas con experiencia de salud mental estén representadas donde se toman decisiones sobre la atención de salud mental y la formación de los profesionales de salud.

Reducir la brecha en salud mental

Sir Graham Thornicroft, presidente de la Comisión Lancet y catedrático de Psiquiatría Comunitaria del King's College de Londres, habló de las oportunidades que tiene el personal de enfermería de contribuir a la salud mental y ayudar a reducir la brecha de salud mental.

El profesor Thornicroft afirmó "Los trastornos mentales son comunes y aproximadamente una cuarta parte de nosotros tiene cada año dificultades de este tipo y tres cuartas partes de nosotros conoce a alguien que tendrá una dificultad mental este año. Pero la gran mayoría de las personas con estas dificultades no reciben atención ni tratamiento. Las personas con depresión grave, incluso en los países ricos, sólo reciben tratamiento una cuarta parte, y en los países de renta baja y media de todo el mundo es menos del 5%. La enfermería es uno de los sectores más importantes del poder de la persona para prestar servicios de salud mental. Pero hay relativamente pocas personal de enfermería especializado en salud mental: entre el 1 y el 3% de los profesionales de enfermería del mundo.

"¿Quién debe proporcionar los servicios de cuidados de salud mental, el tratamiento de evaluación y, a veces, la derivación? En la gran mayoría de los países, dado que los especialistas, como psiquiatras y psicólogos, y de hecho el personal de enfermería especializado en salud mental, son tan escasos sobre el terreno, que el personal de enfermería generalista es quien puede prestar cuidados de salud mental. De hecho, es el único grupo en número suficiente para prestar estos cuidados en relación con la magnitud de las necesidades".

El profesor Thornicroft afirmó que el estigma y la discriminación son barreras importantes que impiden a las personas recibir la atención que necesitan. Vulnera los derechos humanos, es tóxico para las personas y hay toda una serie de tipos de exclusión social derivados del estigma".

Afirmó que el contacto social entre las personas con enfermedades mentales y las que no las padecen es el principal ingrediente activo para reducir el estigma. Subrayó la importancia de utilizar un lenguaje que no cosifique a la persona con la experiencia vivida. Por ejemplo, decir que alguien es una "persona con esquizofrenia", en lugar de un "esquizofrénico".

También se refirió a los terribles efectos de la pandemia en el personal de enfermería: cerca de la mitad del personal de salud y social sufre ansiedad o depresión, una cuarta parte padece trastorno de estrés postraumático y más de la mitad sufre al menos uno de estos trastornos.

El profesor Thornicroft afirmó: "Tenemos que prestar atención a nuestras propias necesidades como profesionales de la salud y cuidarnos con esmero para ser un recurso sostenible".

Un enfoque basado en los derechos humanos

La Dra. Michelle Funk, jefa de la Unidad de Política, Legislación y Derechos Humanos del Departamento de Salud Mental y Consumo de Sustancias de la OMS, felicitó al CIE por las directrices, que considera exhaustivas y con una base sólida basada en los derechos humanos.

Habló de la renovada conciencia general de los problemas de salud mental y de su importancia, lo que significa que ahora se habla más de salud mental que antes. Sin embargo, señaló que quedan muchos retos por superar, como la institucionalización, la falta de acceso a servicios comunitarios, el uso a gran escala de prácticas coercitivas, como la violencia, el abuso y el abandono asociados a los servicios de salud mental, la negación sistemática del derecho de las personas a determinar su propio tratamiento y otras áreas de su vida, el estigma, la discriminación y el des empoderamiento que muchas personas experimentan dentro de los servicios de salud mental.

La Dra. Funk afirmó: "Todas estas son áreas en las que estamos trabajando a través de la iniciativa de derechos de calidad de la OMS, cuyo objetivo es producir un cambio transformador en el campo de la salud mental del que hemos estado hablando. Sin embargo, si realmente queremos avanzar, necesitamos, como paso urgente, promover el cambio de mentalidad a gran escala de acuerdo con un enfoque basado en los derechos humanos y reducir el estigma y la discriminación. Si no lo hacemos, existe un riesgo real de que cualquier nueva política, ley o servicio que se desarrolle suponga un ligero avance respecto a los anteriores, pero sin ningún cambio fundamental en el paradigma".

Se espera que un nuevo programa gratuito de formación en línea de la OMS sobre el modelo de cuidados de salud mental basado en los derechos humanos llegue hasta cinco millones de enfermeras y como resultado afecte a la atención de hasta 50 millones de personas que experimentan problemas de salud mental.

Se solicitará al personal de enfermería que presten cuidados adicionales

Howard Catton, director general del CIE, habló sobre el personal mundial de salud mental. Los datos son limitados porque muchos países y organizaciones no se están centrando lo suficiente el el personal de enfermería de salud mental, que, subrayó, son una parte de vital importancia del personal de enfermería mundial en general.

El Sr. Catton habló sobre el informe del CIE de 2022 Fuerza laboral mundial de enfermería de salud mental: es el momento de priorizar e invertir en salud mental y bienestar . En el informe se destaca la discrepancia entre el pequeño tamaño de los recursos humanos de enfermería de salud mental y la enorme y creciente demanda de cuidados de salud mental.

El Sr. Catton afirmó: "A lo largo de su vida, una de cada dos personas en el mundo desarrollará un trastorno de salud mental, lo que supone aproximadamente la misma proporción que el número de personas que desarrollarán un cáncer. El 71% de las personas con trastornos graves de salud mental y abuso de sustancias no recibe tratamiento. ¿Se imaginan el clamor, la reacción, la respuesta si el 71% de las personas con cáncer en estadio 3 o 4 no recibieran ningún tipo de tratamiento? Existe una enorme discrepancia en la igualdad de acceso a la atención de salud, que nos cuesta, según las estimaciones, hasta 16 billones de dólares. A pesar de que la inversión es rentable, los países siguen gastando menos de dos dólares por persona, a pesar de que sabemos que la inversión es rentable. La consecuencia de estas necesidades insatisfechas es un enorme impacto en los individuos, pero las familias y los amigos cercanos también tienen un enorme papel de apoyo".

El primer informe sobre la situación de la enfermería en el mundo (SOWN por sus siglas en inglés) identificó una escasez crítica de personal de enfermería de al menos seis millones. Pero según una estimación más ambiciosa de lo que supondría la Cobertura Sanitaria Universal, el déficit de personal de enfermería podría llegar a los 30 millones.

El Sr. Catton afirmó: "El aumento de la atención de salud que queremos proporcionar correrá a cargo, en su inmensa mayoría, por el personal de enfermería, que estará en primera línea y a quienes necesitamos para prestarla. Todos los profesionales de enfermería están formados para prestar cuidados de salud física y mental y ejercer de forma holística, pero existe una disparidad: la inmensa mayoría de profesionales de enfermería especializados en salud mental trabajan en países de renta alta".

Los cursos generales de preinscripción en enfermería deberían incluir al menos 80 horas de formación en salud mental, y la experiencia debería adquirirse en diversos entornos de prácticas, incluidas las comunidades, y no sólo en centros de agudos. Dijo que el segundo informe SOWN del año que viene incluiría un análisis más profundo de la situación real del personal de enfermería de salud mental en el mundo.

A continuación, el Sr. Catton presidió un panel en el que participaron los oradores anteriores, además de la Dra. Emma Wadey, directora adjunta de Enfermería Mental del NHS de Inglaterra, y Sheryl Garriques-Lloyd, profesora de la Escuela de Enfermería de la Universidad de las Indias Occidentales de Jamaica y Coordinadora Regional para América Latina y el Caribe de Sigma Theta Tau.

Para ver el webinario, incluyendo el panel, haga clic aquí.