Formación clínica durante la COVID-19
Autores: Nuhad Dumit, BSN, MA, PhD; Lina Younan, RN, MSN, DNP; Ghada Najjar, BSN, MMS, PhD; Gladys Honein AbouHaidar BSN, MPH, PhD
El Día Mundial del Docente, 5 de octubre, les traemos la historia de unos profesores innovadores en la Facultad de Enfermería Hariri de la Universidad Americana de Beirut que han respondido a los retos de la pandemia modificando y adaptando su formación clínica ante la crisis emergente.
A causa del incremento de casos de COVID-19 en Líbano y la aplicación de medidas de confinamiento, el profesorado de la Universidad Americana de Beirut trasladó la impartición de toda la teoría del curso a la modalidad en línea. Uno de los grandes retos fue la formación clínica, en particular para los estudiantes sénior que tenían que realizar en un mes las horas clínicas requeridas para tres grandes cursos: psiquiatría y salud mental, enfermería comunitaria y de salud pública, y liderazgo y gestión. Además, los entornos clínicos de salud mental y los centros de la comunidad dejaron de aceptar a estudiantes de enfermería para proteger a sus pacientes, y el centro médico de derivación cerró algunas de sus unidades y limitó el número de estudiantes. Todo ello suscitó la preocupación de muchos estudiantes respecto al trabajo clínico a causa del miedo a contagiarse del virus y se celebró una reunión del profesorado para debatir los retos y realizar una lluvia de ideas sobre soluciones innovadoras. La finalidad era ayudar a los estudiantes a lograr los resultados del aprendizaje de sus cursos y estar preparados para prestar servicio en diferentes entornos de cuidados durante la pandemia. El profesorado decidió dos objetivos: convertir el mayor número de actuaciones clínicas posible en actividades en línea; y realizar las horas clínicas obligatorias a tiempo manteniendo la seguridad de los estudiantes.
Las actuaciones clínicas se transformaron en actividades en línea para los tres cursos. En el curso de psiquiatría, el profesorado de salud mental guió a los estudiantes durante la recopilación de información sobre el virus para su utilización en una campaña de sensibilización sobre la COVID-19 y sus efectos en la salud mental. Realizaron sesiones de formación sobre la COVID-19 para el personal y los estudiantes y visitantes de la universidad utilizando pósters. Para el curso sobre la comunidad, las actuaciones de intervención en relación con las visitas a domicilio se llevaron a cabo de forma virtual y se pidió a los estudiantes que prepararan una actividad de educación para la salud dirigida a sus familiares sobre la COVID-19 y las medidas preventivas relacionadas. Algunos estudiantes participaron en servicios comunitarios en organizaciones no gubernamentales como la Cruz Roja durante el confinamiento, actividades que contaban para su experiencia clínica.
Completar las horas clínicas obligatorias en un tercio del tiempo fue el mayor reto y requería una solución innovadora. La solución era integrar los aspectos clínicos de los cursos sobre la comunidad, psiquiatría y liderazgo diseñando actuaciones clínicas que permitieran lograr los resultados del aprendizaje. El profesorado responsable de los tres cursos coordinó y estableció el plan de implementación correspondiente. Cada estudiante tenía que realizar una actuación en algún lugar de la comunidad, además del trabajo clínico asignado. En cuanto al requisito de liderazgo clínico, se esperaba que prepararan un plan de alta para sus pacientes incorporando precauciones contra la COVID-19 y que realizaran un seguimiento de su paciente dado de alta a las 24-48 horas para comprobar su estado y poner énfasis en las prácticas necesarias para conservar su salud y cumplir con sus requisitos clínicos en la comunidad. Los estudiantes seleccionaron a pacientes en sus áreas clínicas para valorar su estado de salud mental y detectar patrones de afrontamiento e inquietudes en materia de salud mental al objeto de cumplir con los requisitos del curso de salud mental. Todos los estudiantes cumplieron los requisitos clínicos de los cursos y consideraron las experiencias de aprendizaje muy gratificantes y la innovación extraordinaria. Es la primera vez que se han realizado las experiencias clínicas de tres cursos sénior en formato integrado, lo cual ha permitido a los estudiantes experimentar los cuidados de enfermería de forma completa y holística. El éxito en la implementación se debe a la eficiencia en la planificación y a la eficacia de la coordinación entre el decano, los profesores y los estudiantes y el servicio de enfermería del centro médico. Tanto el Presidente como la Administración sostuvieron plenamente el proyecto y ofrecieron a los estudiantes alojamiento en el campus cuando el país estaba confinado. Los profesores se apoyaron mutuamente y también a los estudiantes durante las sesiones clínicas. Los profesores de los cursos crearon un grupo de WhatsApp con los estudiantes para cuando surgía la necesidad de comunicarse. Las enfermeras de las unidades ofrecieron su apoyo y agradecieron esta situación en la que todos salían ganando. Los estudiantes contribuyeron a paliar la escasez de enfermería en las unidades.
Todo ello ha sido un reto y una experiencia exitosa para los profesores y ha contribuido a modificar los cursos de enfermería para garantizar que los estudiantes aprenden cómo integrar y aplicar el conocimiento adquirido en diferentes cursos. Esta iniciativa construirá e informará las rotaciones clínicas del próximo semestre junto con experiencias integradas.
