La BBC pone de relieve la grave preocupación del CIE sobre la baja tasa de vacunación de las enfermeras
British Broadcasting Corporation (BBC) ha destacado la preocupación del Consejo Internacional de Enfermeras (CIE) por las bajas tasas de vacunación de las enfermeras y otro personal sanitario. En una historia emitida hoy en BBC World Service por radio, televisión y su sitio web, la corresponsal de Salud Global, Tulip Mazumdar, ha denunciado que las enfermeras y otros trabajadores sanitarios se están 'quedando atrás' en los esfuerzos para vacunar al mundo contra la COVID-19.
El CIE, trabajando en colaboración con la Organización Mundial de la Salud, ha puesto a la BBC en contacto con las Asociaciones Nacionales de Enfermería en el mundo para facilitar información sobre la situación. En consecuencia, sus historias se están retransmitiendo a millones de espectadores, escuchantes y lectores de la BBC en todo el mundo.
En ellas, se cita al Director General del CIE Howard Catton respecto al hecho de que cada día mueren 200 trabajadores sociosanitarios a causa del virus.
El Sr. Catton ha declarado: "Si se tratara de un accidente aéreo cada día con 200 personas a bordo, se investigaría de inmediato".
Asimismo, ha afirmado que las enfermeras y los trabajadores sanitarios siguen yendo a trabajar sabiendo que corren mayor riesgo de contraer el virus y que la vacuna podría protegerles. Se les está dejando atrás mientras se está vacunando a otras personas mucho menos vulnerables.
"Parece que, a pesar de las cálidas palabras de apoyo, las enfermeras y los trabajadores sanitarios de alguna forma son prescindibles o desechables", ha añadido el Sr. Catton.
El mayo de 2021, la OMS confirmó que al menos 115 000 profesionales sanitarios habían fallecido por COVID-19. Comentando esas cifras y la falta de vacunas para personal sociosanitario en todo el mundo, el Director Ejecutivo de la Alianza Mundial en pro del Personal Sanitario, Dr. Jim Campbell, ha declarado: "Es una responsabilidad moral que nos debe concernir a todos".
El CIE sigue instando a los países a recabar datos sobre su personal sanitario, en particular las cifras de personal que ha contraído el virus y cuántos de ellos han fallecido.
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